jueves, 3 de noviembre de 2011

caricias secretas.

Sueños, ¿Para qué? ¿Para qué soñar un futuro que puede que no se cumpla? ¿Para que soñar con los recuerdos que has vivido sabiendo que nunca volverán a ser igual, que las cosas han cambiado y que soñar con el pasado solo hace daño?

Porque pienso y tan solo hace un mes me estabas abrazando y ahora son kilómetros los que nos separan, y cuesta aceptarlo. Me dijiste que era la única pero al parecer era solo una más, una de las muchas que han besado tus labios y que no han significado nada, todo fueron mentiras para conseguir lo que querías, otra táctica promiscua de casi todos los hombres. Ahora ni un hola, ni un que tal, y es difícil, difícil de creer y de aceptar que ya nada será igual. Para mí tú fuiste especial, fuiste el que marcó el antes y el después, fuiste el que decidió un futuro para mí y yo como una tonta caí a tus pies, sin sabes que ese sueño que entonces se cumplió acabaría tan rápido y que nada volvería a ser igual.

Y a pesar de todo aún sonrío, aun son dulces los recuerdos de aquel momento en el que nuestros cuerpos se acercaron por primera vez, se tocaron como nunca lo habían hecho, nuestra respiración se volvió acelerada, nuestras caricias lo decían todo, eran sinceras y nuestras caricias, solo secretas.




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